GLOW

¿Verdad que todos sabemos que la lucha libre es uno de los deportes que se basa en la actuación, que es una mentira fantasiosa elevada a proporciones magnánimos?

Pienso que este deporte hoy en día ha llegado al punto en que a través de un cinismo desparpajado bis entregan un espectáculo, un show, donde hay buenos y sus respectivos villanos, donde hay historias dramáticas, de compañerismo, equipo, pero también de traición e hipocresía, todo esto envuelto con caídas, vuelos, empujones, llaves y martinetes.

Ver las en la televisión o en una arena resulta muy divertido, porque como público desfogamos todo ese estrés o tensión de la vida diaria que tenemos atravesado y no hemos podido fluir, al estar presente en un show de lucha libre nos inspira para gritar, saltar, mentar madres, la experiencia se convierte en algo inolvidable, divertido y con ganas de repetir. Si se fijan, este punto de vista de la lucha libre es una visión un tanto egoísta porque no estamos divirtiendo desde nuestra trinchera, pagar un boleto, apoyar a un favorito, y que nos diviertan, ¿pero nos hemos preguntado alguna vez quiénes son verdaderamente esas personas atrás del ring, de la máscara o la cabellera? ¿Quién son en verdad El Santo, Rayo de Jalisco, Huracán Ramírez, El Perro Aguayo, El Místico, El Shocker, entre otros muchos?

Original de Netflix, llega Glow creado por Liz Flahive y Carly Mensch, una serie en el que nos dan respuesta a esta interrogante, pero desde el punto de vista femenino. Es la historia individual e íntima de un grupo de mujeres que debutarán como luchadoras del ring. Como el título de la serie, cada una de ellas busca ser un brillo cual brillantina o lentejuela, porque su vida no ha sido fácil, al contrario gris, opaca, indiferente para el resto de la humanidad. Es hora de triunfar o por lo menos darse a notar alguna vez en su miserable vida.

Glow también es el nombre del show de lucha libre femenil que está dirigiendo Sam (Marc Maron), un director de cine mediocre, poco agraciado, poco exitoso, sin ímpetu por conseguir lo que desea, es más podría decirse que es un tanto derrotista, con una persona así al frente de un programa de televisión podría decirse que tiene el fracaso asegurado. Es el clásico creador o productor que se cuesta con sus actrices. Pero como en el fondo le tiene fe a Glow, entonces convoca a un grupo de actrices y mujeres venidas a menos, inexpertas, poco ambiciosas pero con la esperanza de darle un giro intempestivo a su vida ruin y pobre espiritualmente hablando.

Quienes llevan el peso de la historia son tres personajes principales: Sam el creados de Glow; Ruth (Alison Brie - Mad Men) una actriz casi del método, actriz que a lo más que ha llegado es a obras underground, experimentales que sólo tienen público de cinco personas, una actriz intensa que se toma muy en serio cada papel por más inútil que éste sea; de pronto le llega la oportunidad de formar parte del elenco de un show de lucha libre; Ruth es la mejor amiga y posteriormente (por una traición) enemiga de Debbie (Betty Gilpin) una actriz de rostro agelical quien tenía el gran porvenir como actriz y que se le recuerda por un gran papel en una telenovela años antes, el matrimonio y sus deberes la alejaron de los reflectores, pero es precisamente ese odio que tiene por su ex amiga Ruth que le abre las puertas de formar parte también de Glow.

Esta serie es una mezcla exacta y redonda entre el drama y la comedia, lo que se le conoce como dramedy, porque vemos en algunas ocasiones ciertos momentos dramáticos que les acontece a cada una de las mujeres, pero hay otros personajes o circunstancias en los que se ven inmiscuidas que arrancan una sonrisa o risilla nerviosa.

Glow es una especia de locomotora en el cual a tracés de la planicie exploramos diversas situaciones de cada de las mujeres, una amalgama de esperanza, ilusión, traición, tristeza y depresión.

Trailer de Glow aquí:

GLOW
Creador: Liz Flahive y Carly Mensch
Con: Alison Brie, Betty Gilpin y Marc Maron
Produce: Netflix
Inglés
Estados Unidos
Temporada 1 - 2017